Para que los gobiernos actúen de manera eficiente, es importante contar con un sistema fácil de usar y que funcione sin problemas para que los ciudadanos y las empresas puedan pagar sus impuestos, multas e infracciones de tránsito. Al aceptar pagos electrónicos, los gobiernos simplifican la realización de pagos para la población y al mismo tiempo obtienen las siguientes ventajas:
Recaudación de ingresos más rápida con un costo menor